La propuesta apunta a mejorar la
competitividad del sector local y promover el desarrollo socioeconómico de la
región. Con el objetivo común de incrementar la productividad de carne de
calidad en un marco de sustentabilidad ambiental, el clúster nucleará a
productores
e instituciones clave del sector productivo para el desarrollo de
estrategias y mecanismos de trabajo conjuntos.
Representantes de la Dirección de
Programas y Proyectos Sectoriales y Especiales (DIPROSE), del programa Cambio
Rural, dependientes de la Secretaría de Agroindustria de la Nación, organismos
e instituciones del ámbito nacional, provincial y municipal, conformaron una
reunión con productores y actores clave del sector ganadero del Valle Inferior
del Río Chubut con el objetivo de evaluar las posibilidades de creación de un
Clúster Ganadero que potencie la actividad del sector en la región.
La presentación, realizada en las
instalaciones del Centro Regional Patagonia Sur del INTA, contó con destacados
aportes de profesionales del INTA, CORFO, Ministerio de la Producción de la
Provincia del Chubut, representantes de los Municipios de Trelew, Gaiman y 28
de Julio, Cooperativas del VIRCh, productores, industria, comercio y actores clave
de la cadena ganadera, quienes persiguen el objetivo común de generar acciones
necesarias para impulsar la ganadería bovina en el Valle.
Dentro de las temáticas
priorizados a trabajar en el sector, los actores involucrados identificaron la
necesidad de trabajar en alimentación, índices y pesos de faena,
financiamiento, elaboración de un modelo productivo para la zona; necesidad de
contar con un laboratorio de análisis de forraje, bienestar animal, y políticas
de educación para los consumidores locales.
En tal sentido, se destacó que la
competitividad en la zona, podría basarse fundamentalmente en un mayor y más
eficiente aprovechamiento de los recursos naturales (suelos, agua y radiación
solar) para incrementar la producción primaria de forraje (principalmente
pasturas) y consecuentemente la productividad de carne por hectárea. Además, la
ubicación geográfica (zona libre de aftosa), la escala y las características de
los sistemas de producción debieran ser atributos que realcen el valor de la
carne producida en la zona.
Por otra parte, se puntualizó en
trabajar en la consolidación del mercado y propiciar el mejoramiento de las
condiciones de comercialización a través de la integración vertical y
horizontal, y el agregado de valor de los productos terminados por medio de
alianzas entre producción e industria, lo que contribuiría a reducir la
atomización de la oferta de ganado que ingresa a engorde generando falta de
precios de referencias para las operaciones y alta variabilidad en los mismos.
La intervención, desde la
investigación y desarrollo, transferencia y extensión de tecnologías y de las
políticas públicas, lograría una mayor eficiencia y productividad de los
sistemas forrajeros y ganaderos, y un mayor agregado de valor de los productos
considerando la sustentabilidad de los recursos utilizados.
Para ello, se considera
estratégico profundizar las vinculaciones institucionales en distintos grados,
programas nacionales y provinciales intervinientes en el sector para la
intervención en el área geográfica de manera ordenada y articulada, con roles
bien definidos en distintos ámbitos vinculados a la promoción y fomento de los
sistemas ganaderos del VIRCh.
El VIRCh posee instituciones con
el conocimiento y la experiencia local, con antecedentes de trabajo en
conjunto, además de sitios de capacitación formales e informales que permitirán
el aporte de agentes operativos en todos los eslabones de la cadena, cooperando
con el objetivo común de incrementar la productividad predial y zonal de carne
de calidad en un marco de sustentabilidad ambiental que permitirá diferenciar el producto logrado por
sus propiedades intrínsecas (calidad de res, bienestar animal, eficiencia de
conversión, nutraceútico) y extrínsecas (amigable con el medio ambiente,
eficiencia del uso del agua, huella del carbono, minimizando los efecto del gas
invernadero).
Esto solo será posible a través de un Plan Estratégico de Largo Plazo, con la intervención de toda la cadena: sector público y privado, desde el productor al consumidor, con el apoyo de metodologías probadas para lograr tal fin.
Fuente: Eugenia Iglesias Prensa INTA Chubut